Atletismo
Proverbios 19:2 NTV
"El entusiasmo sin conocimiento no vale nada; la prisa produce errores."
En el entrenamiento de los velocistas, más allá del trabajo para alcanzar velocidad, se utilizan 2 estrategias muy importantes. Podría decir que es el "principio de la tortuga y la liebre" aunque con una variante. El velocista debe prestar atención a la fuerza de salida inicial y al último tramo de su carrera.
El momento de la salida marca el terreno, da seguridad, le muestra un poco a los demás "de qué estás hecho". Pero una vez en carrera, debe mantener un paso firme, constante, sin excederse ni gastar fuerzas innecesariamente.
Cuando está cerca de terminar, en los últimos metros (desconozco cuantos) es cuando debe acelerar, habiendo guardado energías y evitando desgastes y agotamiento. Siguiendo esta disciplina, la victoria está casi asegurada. Y digo casi, porque como seguramente todos usarán la misma técnica, queda el factor humano para determinar quien es el más rápido.
¿Qué pasaría si en vez de seguir este método gasta todas sus energías en los primeros metros? Lo más probable es que el cansancio le gane y no pueda llegar al final.
Así ocurre con la diferencia entre motivación y disciplina, o con la diferencia entre el arrebato y la planificación. Cuando salís alocadamente a emprender cualquier cosa, sin técnica, sin preparación, sin conocimiento del terreno o de los contrincantes… lo que está casi asegurado es la derrota.
Pero si hacés los deberes como dice Proverbios 24:27 "Prepara tus labores fuera, y disponlas en tus campos, y después edificarás tu casa" , si investigás el terreno, te preparás, conocés las opciones y recursos a tu disposición; si empezás a paso lento pero firme… lo que está casi asegurado es la victoria
Dice Proverbios 19:2 "El entusiasmo sin conocimiento no vale nada; la prisa produce errores."
No tomes decisiones apresuradas. No salgas corriendo ante todo lo que se te presente. No des manotazos de ahogado ni te tires a la pileta sin chequear el agua antes. Como dice después Pablo sobre poner obreros en función, "no impongas las manos con ligereza" (1 Timoteo 5:22) para no quedar pegado en situaciones de las que tengas que responsabilizarte.
Por el contrario: pasos lentos pero firmes, firmes pero lentos. Siempre tené en cuenta que "a los que dan pasos de gigante, los derriban los pequeños David"
Que tengas un excelente día!

Comentarios